Si estás planeando una partida de paintball con los amigos, la familia o los compañeros de trabajo, en este artículo te vamos a presentar una serie de útiles consejos para que aprendas a ser un buen jugador y tengas en cuenta que la seguridad va por delante de todo:
- Estrategia: Para una buena partida de paintball la estrategia es lo principal a tener en cuenta. Para poder vencer al equipo contrario, lo primero es diseñar de manera conjunta cual será la estrategia a seguir de nuestro equipo, para así garantizar la realización de las acciones de forma coordinada. Las estrategias que podemos diseñar son las siguientes: Colocar a cada jugador en un sitio estratégico, teniendo claro lo que tiene que hacer cada uno, buscar la superioridad numérica, buscar los sitios del campo que más ventajas ofrezcan, tales como puntos elevados o escondidos, así como tener súper claro el objetivo del juego para poder actuar en consecuencia.
- Reconocimiento del campo: Antes de empezar la partida deberemos reconocer el campo para poder diseñar mejor la estrategia.
- Dinamismo: El paintball implica un movimiento continuo. Si aprendemos a movernos de forma correcta por el campo, siempre cuidando las coberturas, seremos jugadores mucho más dinámicos y peligrosos.
- Forma física: Es obvio que el paintball puede requerir el esfuerzo que cada jugador esté dispuesto a presentar, es decir, puedes pasarte la partida afincado como francotirador o sin parar de moverte por el campo. Nosotros te recomendamos que si quieres disfrutar la experiencia al máximo y presentar batalla, lo ideal es que estés medianamente en forma para que puedas moverte sin problemas por el campo de batalla. El paintball practicado a tope es un juego que requiere de un importante despliegue físico, y si no estás en buena forma puede que llegado a un punto te falte el aire para respirar.
- Limitaciones: Siempre será necesario que conozcamos las limitaciones de nuestro material, tales como la precisión de la pistola, la distancia a la que podemos disparar, o la munición con la que contamos. Necesitamos tener claro que lo importante es ganar la guerra y no solo una batalla, así que si pensamos que un juego ya está perdido lo mejor será guardar esfuerzo y material para ir a tope a por el siguiente.
- Mantener la calma: En el paintball es súper importante mantener la mente fría. No debemos asumir riesgos innecesarios por nuestra cuenta, ya que estos pueden perjudicar al equipo entero y podemos llegar a ser eliminados. Lo normal es que en el campo nos entre la vena heroica y queramos llegar a todos los riesgos que se nos planteen, pero tendremos que valorar de una forma calmada si merece la pena arriesgarnos o no.
- Jugar en equipo: Como ya hemos ido comentando en los puntos anteriores, el paintball es un juego de equipo y en esto radica la clave del éxito. Un jugador solo nunca podrá derrotar a un equipo entero, por bueno que sea.
- Comunicación: Otra de las claves importantes del paintball. No es tarea fácil comunicarse una vez empezado el juego, y es por ello que insistimos en la necesidad de plantear unas pautas de equipo antes de comenzar el juego. Para que la comunicación fluya durante el juego, deberemos estar compenetrados y atentos a nuestros compañeros. Si no tenemos una buena comunicación entre nosotros, el equipo irá a ciegas y la estrategia se debilitará bastante.
- Objetivo vs. Objetivos: Tenemos que diferenciar una cosa de la otra, aunque ambas son fundamentales. El objetivo es el objetivo global, y los objetivos son los pequeños objetivos que hemos marcado en nuestra estrategia para poder conseguir el objetivo global. A la hora de fijarnos objetivos de tiro nunca tendremos que perder de vista el objetivo global.
- Atención a las herramientas: En todo momento tendremos que estar pendientes de la equipación y los recursos, tales como la munición. Será necesario que comprobemos si la marcadora funciona correctamente y si la máscara esté limpia y no se empañe. Si todo esto está correcto, deberemos recordar no malgastar la munición y la manera en que podemos recuperarla, por ejemplo, con juegos de recompensa, zonas de seguridad donde comprarla, etc. No hace falta comentar el chasco que sería tener al último adversario a tiro para ganar la partida y habernos quedado sin munición.